En 1995 descubríamos en la pantalla grande o gracias a nuestros VHS que los juguetes estaban vivos, que tenían sus diferencias pero en general colaboraban para el bien común, así como para el bien de sus amos. Llegaba Toy Story, una idea original de un arriesgado estudio de animación.
No entiendo muy bien por qué con cinco años la idea de que mis juguetes pudieran estar observándome de continuo mientras fingían no estar vivos me parecía entrañable y no extremadamente inquietante, pero así era, y cuatro años más tarde nadie hubiera podido detenerme de ver la segunda parte en el cine donde, bien acompañado en mi asiento por mi juguete Buzz Lightyear, pude ver como esos personajes a los que creía conocer podían evolucionar y ser aún más heroicos y aún más humanos.
Once años después y tras muchas complicaciones, el estudio ahora célebre Pixar, referente absoluto en cine de animación, vuelve a impresionarnos y a devolver nuestra mirada hacia los juguetes, la infancia y nuestra propia añoranza del pasado.
«Más de lo mismo» nunca fue tan bueno:
No había manera alguna de que después de ver ésta película no me sintiese obligado a expresar mi opinión en algún sitio indeleble. Me faltan adjetivos para expresar todo lo que ésta película es para mi, pero voy a intentarlo:
Increíble, emocionante, inspiradora, cautivadora, mágica, entrañable, inteligente, fantabulosamente rebosante de alucinancia… once años de espera no han sido NADA.
A riesgo de ver afectado mi criterio por la emoción, diré que, en mi opinión, es la mejor de las tres, lo que resulta todo un logro para lo que nos tienen acostumbrados a la hora de sacar secuelas… Es una mejora en todos los aspectos, nuevos personajes perfectamente definidos, más profundidad para los que ya conocíamos, repleta de guiños memorables y un guión llevado a la perfección y que nos acompaña como en una danza del principio hasta el final (ambos destacables por si solos), sin pasos innecesarios o amagos imprecisos, seamos niños o adultos, pues Toy Story tiene una historia distinta que contar para cada uno de nosotros.
Un poco de la trama:
La película empieza con una introducción en la que vemos lo que los personajes principales han sido para Andy mientras crecía, y lo que son ahora que Andy está a punto de ir a la universidad, unos juguetes relegados a un 
baúl con los que nadie juega, hasta que la madre de Andy informa a éste de que debe hacer limpieza en su habitación, y que debe decidir cuales guardar en el ático y cuales tirar. Por una cadena de sucesos desafortunados, los juguetes acaban dolidos, pensando que los han abandonado, y toman decisiones que les dividirán y les harán pasar algunos malos tragos.
Ésta película puede ser especialmente interesante para alguien que, ingenuo de él, haya subestimado alguna vez las películas de animación, como Los Increibles, Buscando a Nemo o la sobresaliente Up (todas de éste mismo estudio), cometiendo alguna vez el error de verlas sólo como cosas para críos, dejándolas caer en el olvido como Andy abandona sus juguetes al hacerse mayor. Éstas y otras películas te dan la oportunidad de vivir una segunda infancia y recordar las cosas que uno crea que han dejado de ser importantes.
Pequeña reflexión:
Así, invito a todos los geeks de la tecnología ocupados que nos lean a tomarse un descanso, ver Toy Story 3 cuando tengan la oportunidad, y quizá pasar un rato mirando a sus viejos juguetes, recuerdos e ideas.
Por mi parte he de confesar que he jugado un rato con mi viejo Buzz.
En cuanto al apartado técnico, sorprende la expresividad de los personajes, el gran número de juguetes nuevos y la perfección con la que recrean y presentan en pantalla el mundo desde un punto de vista tan excepcional, cuidando cada detalle. Ésta tercera parte se estrenará en España el 23 de julio, con la posibilidad de ser vista en 3D, y está recibiendo excelentes críticas en Estados Unidos. Por mi parte, cierro la entrada con una puntuación perfecta para ésta película, 10 de 10, siendo una pena tener que puntuar con un número finito una película que va a ir hasta el infinito y más allá de vuestras más altas expectativas.
Consejos para citas de Ken, uno de los personajes estelares del film:
Fuimos ayer, 31 de Julio, a verla con los amigos con los que fuimos a ver Toy Story en 1995 y todos nuestros hijos/as que por supuesto no habian nacido todavia en 1995. Ya entonces la pelicula era para todos, no solo para crios, y esta bien que han continuado en esa linea. El mundo iria mucho mejor si toda la gente recordara cuando fueron ninos. En Inglaterra hay un trozo en el que Buzz habla en espanol con subtitulos en ingles que es super divertido. Como lo hacen en Espana? Y el 3D es fantastico, mejorando con cada pelicula. Ya tenemos todos gafas de 3D pues en un futuro no muy lejano todo el cine sera 3D. Y despues sera sin gafas…
No he visto la película, pero por lo que he leido esa parte en la que buzz habla en español se pierde con el doblaje… Está recibiendo muy buenas críticas la película se ve que los chicos de pixar siguen en forma.