Que los juegos de naturaleza indie están aumentando en número de una manera bastante generosa en los últimos años no es un secreto. Que muchos de los que ven la luz son reediciones sin mucho trabajo de los juegos clásicos o juegos totalmente nuevos pero con una mecánica demasiado aburrida que no llega a cuajar tampoco.
Existe la posibilidad de que tú, que estás leyendo ésto, seas un gamer empedernido con el tiempo necesario para informarte de todos los lanzamientos de juegos tanto mainstream como indies, leer todas las reviews de las páginas sobre juegos más importantes, comprar todas las revistas del sector y seguir el twitter de Hideo Kojima (que por cierto, es bastante divertido). También existe la posibilidad de que no sea así, y hayas decidido dedicarnos a nosotros parte de tu preciado tiempo.
Es para los que están en ésta última situación para los que quiero fundar una nueva columna, Pasión Indie, en la que trataré de encargarme personalmente de señalar esos esquivos (unos más que otros) juegos indies baratos, dinámicos e imaginativos que nos gustan a todos, por si alguien los hubiese pasado por alto, sea por falta de tiempo, despiste o confusión.
Al tema:
El juego de ésta semana, por conveniencia y poca antigüedad es el frenético Plain Sight, cuyo lema es: «Kill Yourself».
Plain Sight es un juego simpático, simple y adictivo en el que unos ninjas robóticos bastante quejicas se aniquilan en un escenario cuasi ingrávido.
Interesante…¿algo sobre la mecánica del juego?:
El objetivo del juego (al menos en el modo Deathmatch) es huir o protegerte de los ataques del resto de robots y esperar la oportunidad de poder sorprenderles y matarles tu a ellos. Cada vez que matas a uno de esos robots, absorbes su «energía» y creces, haciéndote más jugoso como objetivo para el resto de jugadores. La única manera de ganar la ronda es explotando cuando eres lo suficientemente grande, para convertir así la energía en puntos.
Como añadido, puedes usar esos puntos para adquirir mejoras para tus robots, como mayor velocidad, escudo o capacidad de salto, así como bonus temporales, como una espada de fuego o un escudo automático.
¡Dinos más!:
Además, hay varios modos de juego, Capturar la Bandera, Deathmatch por equipos, Mayor Detonación o el curioso modo Botzilla, en el que un jugador es un robot gigante con mucha energia y los demás han de trabajar juntos para vencerle.
El juego se puede obtener por unos 9 euros en Steam, y aunque cuesta un poco hacerse con el control al principio y no dar vueltas erráticamente por el escenario muriendo cada dos por tres enseguida se le coge la mecánica y te ves sudando cada punto, haciendo cabriolas a toda velocidad en épicos y coloridos combates a muerte…y si no te atreves con contrincantes humanos, siempre puedes probar con los bots.
Mayores inconvenientes:
-No es posible jugar al juego sin conexión a Internet, aun si lo que quieres es practicar contra bots.
-Aun parece haber un pequeño número de servidores, y con latencias algo altas que pueden significar una terrible impotencia y un afeitado extremo de circuitos en muchos casos.
-Un 70% menos divertido si no juegas con amigos con tu mismo (o menor) nivel de habilidad.
-Puede ser confuso para algunos usuarios.
Debes probarlo si:
-Tienes amigos hábiles y aburridos.
-Quieres pasar un buen rato por poco dinero.
-Te maravilló la pelea en ingravidez en la última película de Christopher Nolan.