Este jueves pudimos acudir a la presentación de los nuevos modelos de Nokia, los primeros con el SO Windows Phone. Con una feroz competencia (Samsung, HTC, LG, la propia Apple) han logrado su objetivo inicial: no dejar a nadie indiferente.
La alianza entre Nokia y Microsoft tiene menos de un año. Nokia se había visto, pese a ser la casa con más tradición en Europa, relegada a un papel menor en esta generación. Y Windows Phone no tenía la popularidad de Android o IOS.
Fruto de esta unión llegan dos móviles, el Nokia Lumia 800 y el Lumia 720. Mientras que el primero es un smartphone de la más alta gama, el segundo es un poco más asequible pero con el mismo procesador Made in Nokia de 1,4 Ghz y acelerador de gráficos que su hermano mayo.
¿Y qué aportan los Lumia que no hayamos visto hasta ahora? De primeras, su diseño rectangular, que parece hecho de una pieza. Su pantalla es curvada y bastante resistente. Y una cámara de gran angular que llama la atención.
La novedad que más impacta es el servicio de unificación de contactos. Cuando accedamos a uno de ellos, se nos mostrará toda su actividad, no solo los SMS o llamadas que nos haya mandado sino lo último que ha escrito o visto en Facebook, Twitter, Linkedin…
La propia Nokia aporta 3 importantes opciones de software. Nokia Mapas y Nokia Conducir responden perfectamente como cartografía y GPS. Y Nokia Música nos proporciona un hilo musical, funcional tanto online como offline, de millones de canciones a nuestra elección.
Por último, cabe reseñar todas las virtudes que aporta Windows Phone. Aparte de una funcionalidad fantástica, el manejo de la música vía Zune, la conexión con Xbox Live y una suite de Office completa e inmejorable lo convierten en un titán.
Me encanta el diseño del lumia 800. Ademas he tenido la oportunidad de juguetear con un Winpho y me ha impresionado muy gratamente, aunque sin dudarlo me quedo con mi Androide
Genial si no fuera por el sinónimo de lumia en castellano.